te veo dormir en mi cabeza en un campo de flores casi marchitas y de olores dulces como la miel, intento escapar del laberinto que existe en mi conciencia, abro las ventanas de mis pupilas y escapo en forma de viento, llego a tu presencia sublime que reposa con mi recuerdo, entro por tus labios hasta tus pulmones, te acaricio por dentro, salgo y tomo tu mano, siento tu aroma y beso tus dedos, te despiertas y me miras con tus ojos de dulzura, de abrazo y te invito a volar, aceptas y flotamos sobre las nubes hasta el infinito, creo arcoiris para tu deleite hasta que caemos en forma de lluvia, nos azotamos con violencia sobre las flores por las cuales te imagine, en un abrazo sordo descansamos, mirándonos a los ojos, desnudándonos con nuestra respiración, siento tu aliento en mi cuello y se que puedo dormir, se que me puedo ir esta vez, se que puedo cerrar los ojos y que seguirás ahí, se que estamos los dos y nadie mas.
No hay comentarios:
Publicar un comentario